Publicado el 27 de octubre de 2010 por Marlyn
Alcanzar el peso ideal –o lo más cercano a eso- es como una competencia en las olimpiadas. Llegar a la meta sin tropiezos representa un gran desafío. Sin embargo, lograrlo es posible cuando se aprende a controlar la ansiedad y como ayuda algunos trucos de fácil aplicación.
- Justo al levantarte, en la mañana y en ayunas, bebe un vaso de agua. Eso incentivará la eliminación de toxinas a través de la orina.
- Nunca dejes de desayunar. Expertos afirman que es la comida más importante del día. Un desayuno completo aporta la energía necesaria para el buen funcionamiento del organismo.
- Come cinco veces al día, es decir, aparte de las tres comidas tradicionales añade dos meriendas, una a media mañana y otra a media tarde. Así el cuerpo se habitúa a ingerir pequeñas porciones.
- Al servir la comida, hazlo en platos medianos. Evita los grandes o voluminosos. El truco es que la cantidad se adecue a él, no se puede ver ni más grande ni más pequeña.
- Sustituye el aceite común por el de oliva, las golosinas por las frutas, el pan blanco por el integral.
- Cuando caigas en la tentación de un chocolate, una hamburguesa o cualquiera que sume cuantiosas calorías; disfrútalo, saboréalo sin remordimientos. La mente es muy poderosa, entonces, si después de comer te torturas probablemente ante el espejo te verás gorda.
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